Varios países de Europa cierran su espacio aéreo con Reino Unido por miedo a la nueva cepa del coronavirus

Pinterest LinkedIn Tumblr +

Reino Unido fue el segundo país, después de China, en iniciar la vacunación contra la Covid-19, este último con la vacuna Pfizer y BioNTech. Era la envidia del resto de países, sin embargo, la aparición de una nueva cepa del virus le ha puesto en el disparadero y desde ayer varios países de Europa han suspendido sus vuelos desde y hacia el país inglés.

El miedo y cuidado de que esta nueva cepa se expanda sin control, como pasó con la Covid-19 ha llevado a Países Bajos, Bélgica, Italia, Alemania, Austria, Portugal, España y Francia a extremar las precauciones y de momento, han limitado su contacto aéreo con este país por 15 días, hasta que se tengan más datos precisos de esta nueva mutación del virus.

Hasta el momento no existen pruebas de que la nueva variante sea más letal que las anteriores, pero si indicios de que es más infecciosa, el 70%, lo que ha desatado la alarma en el continente y los contactos entre socios comunitarios ante la posibilidad de que más países se sumen a lo que ya amenaza con convertirse en un aislamiento de Gran Bretaña.

Países que han cerrado su comunicación aérea con Reino Unido

El primer país en reaccionar fue el gobierno de Países Bajos que optó por prohibir el tráfico aéreo de pasajeros con el Reino Unido de forma inmediata y durante al menos diez días, siguiendo una recomendación de las autoridades sanitarias neerlandesas.

En un comunicado, el Ministerio neerlandes de Sanidad confirmó que un estudio realizado a principios de diciembre reveló que también circulaba un virus con la variante descrita por el Reino Unido, y que tras la alarma en Londres las autoridades sanitarias analizan esta cepa de coronavirus, cómo se produjo el contagio de la primera persona afectada y si hay casos relacionados.
La prohibición del gobierno de Bélgica es provisionalmente por solo 24 horas a partir de la medianoche del domingo, pero además del transporte aéreo incluye el ferroviario, indicó el primer ministro del país, Alexander De Croo, a la televisión pública flamenca VRT.

Explicó que la medida se aplicará en un primer momento durante veinticuatro horas porque todavía se están realizando análisis científicos sobre la nueva variante de coronavirus.

Bélgica está en contacto con Francia porque los trenes Eurostar procedentes del Reino Unido también pasan por ese país y los viajeros podrían después entrar en territorio belga.

Italia también suspendió los vuelos, y prohibió la entrada a las personas que hayan estado en el Reino Unido en los últimos catorce días. La decisión del gobierno italiano fue comunicada a las autoridades de Londres.

“Como Gobierno tenemos el deber de proteger a los italianos y por esa razón, tras haber avisado al Gobierno británico, estamos a punto de firmar una medida con el ministro de Sanidad para suspender los vuelos con Gran Bretaña”, anuncio el ministro de Exteriores, Luigi Di Maio.

El titular de Sanidad, Roberto Speranza, firmó poco después la ordenanza que suspende los vuelos y prohíbe la entrada en Italia a quienes hayan estado en el Reino Unido en las últimas dos semanas. Las personas que hayan estado en ese país y se encuentren ya en Italia deberán someterse además a una prueba de coronavirus.

Austria también ha prohibido asimismo el aterrizaje de aviones procedentes del Reino Unido, para atajar posibles contagios.
Otros países, como Portugal, han anunciado que no suspenderán al menos de momento los vuelos con las islas británicas. Tras conocer el anuncio de varios países de suspender sus vuelos con el Reino Unido, España pidió a la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, y al presidente del Consejo, Charles Michel, una respuesta “comunitaria coordinada ante esta nueva situación”.

Fuentes del Ejecutivo español aseguraron que el objetivo es proteger los derechos de los ciudadanos comunitarios “desde la coordinación, evitando la unilateralidad”.

A esa petición se sumaron Francia y Alemania, que también reclamaron a la UE una respuesta comunitaria conjunta.

El palacio presidencial del Elíseo explicó en ese sentido que el presidente francés, Emmanuel Macron, había debatido la situación sanitaria en el Reino Unido con la canciller alemana, Angela Merkel; la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.

En qué consiste esta nueva cepa del Covid-19

Los investigadores José M. Jiménez Giuardeño, del Departamento de Enfermedades Infecciosas del King’s College de Londres, e Iñaki Comas, del Instituto de Biomedicina de Valencia (IBV-CSIC) y director del consorcio SeqCovid-Spain, que estudia el genoma del coronavirus, explican a Efe lo que se sabe y no se sabe hasta ahora.

Explica el doctor Jiménez que hay sospechas de que esta nueva variante pueda ser la causante del aumento en el número de contagios en una zona determinada de Reino Unido, aunque todavía no hay datos suficientes para afirmarlo.
Para tener respuestas más definitivas habrá que esperar meses, señala. Lo primero será aislar el virus con las mutaciones o crearlo usando los clones infectivos de los que disponemos, hacerlo crecer en cultivos y realizar diferentes experimentos, tanto in vitro como en modelos animales, para caracterizar las mutaciones y evaluar cómo se comporta en comparación con las que ya se conocen.

La pregunta que todos quieren saber es en qué ha cambiado ahora el SARS-CoV-2. Hasta el momento, según la entrevista publicada por la agencia EFE, el virus ha adquirido 17 mutaciones distintas (14 cambios de aminoácidos y 3 deleciones). Dos de ellas se han descrito previamente: la mutación N501Y aumenta la afinidad de la proteína S por el receptor, lo cual aumentaría su infectividad; mientras que la deleción (un tipo de mutación genética) 69-70del de la proteína S se ha descrito que podría afectar a la evasión del sistema inmune por parte del virus.

La preocupación por esta nueva mutación, distinta a las anteriores, es porque lleva una combinación de mutaciones cada una de las cuales se había visto por separado, pero que, por primera vez, se ven juntas en una sola cepa, explica Comas. Cada una de ellas se sabe que probablemente tenga un impacto en la biología de la infección, pero no sabemos exactamente cuál, por lo tanto, son preocupantes, aunque el efecto no está claro y lo que ha hecho Londres es prevenir.

Jiménez destaca, además, que se han juntado dos cosas a la vez, un aumento importante en el número de contagios en una zona específica y la presencia de una nueva variante del virus en una buena parte de los infectados.

Que el virus mute es normal, pero lo que levanta las sospechas es que esta nueva variante, con 17 mutaciones tan específicas, se haya impuesto de forma tan clara y además parezca estar relacionada con un aumento significativo en el número de contagios. Otra razón por la que preocupa tanto es porque 8 de las 17 mutaciones se encuentran en la proteína S (la llave que utiliza el virus para entrar en la célula), lo que podría afectar a la forma en la que infecta el virus.
Ambos expertos coinciden en que todavía no se sabe de dónde procede esta nueva variante. Aunque una de las posibles explicaciones es que el virus evolucionó así en un paciente con una infección crónica más difícil de curar, lo que da tiempo al virus, explica Comas, a acumular un gran número de mutaciones.

Lo interesante, destaca Jiménez es que, según el estudio de las distintas secuencias, todo parece indicar que el virus ha adquirido las 17 mutaciones prácticamente a la vez, algo que es muy poco usual.

La primera vez que se detectó fue en un virus aislado el 20 de septiembre, pero, en un primer momento, no generó ninguna sospecha. A mitad de noviembre ya estaba presente en el 26 % de los casos y en la semana del 9 de diciembre en el 60 % de las muestras secuenciadas de pacientes en Londres, dice Jiménez. Agregó que no hay ninguna evidencia ni sospecha de que pueda ser más letal u originar una enfermedad más grave, pero habrá que estudiar los casos muy de cerca para llegar a una conclusión definitiva.

Eficacia de la vacuna y mutaciones del virus

Que esta nueva variante del virus pueda afectar la eficacia de las vacunas que se están administrando, es algo que todavía no se sabe, pero en principio no deberían verse afectadas, considera el doctor Jiménez. Las vacunas disponibles utilizan la proteína S como antígeno para generar una respuesta inmune, pero los anticuerpos generados suelen reconocer distintas partes de la proteína.

Comas indica que vacunas como la de Pfizer o Moderna se pueden “actualizar” rápido y generar nuevas dosis, además recuerda que “todos los años actualizamos vacunas como la de la gripe, estamos acostumbrados. Lo importante es ser capaces de detectar estas variantes y, sobre todo, aquellas que pudieran aparecer como escape cuando la vacuna se empiece a administrar”.

Además de las ya disponibles, se están desarrollando vacunas muy diferentes, basadas en diversas partes del virus y que permiten protegernos de diferentes maneras. Eso hace importante que dispongamos de un arsenal de vacunas variadas y, por ello, es importante que las vacunas españolas, aunque vayan más lentas, lleguen a ensayos clínicos.

Con respecto a las mutaciones de este coronavirus, explica Jiménez, que es lo normal y aunque los coronavirus mutan con menos frecuencia que otros virus, es esperable que cada cierto tiempo aparezcan mutaciones.

Hasta el momento, se han estudiado al menos 300.000 secuencias víricas del SARS-CoV-2 y se han encontrado miles de mutaciones, pero ninguna ha causado tanta preocupación a nivel internacional como esta.

Share.

About Author

Comments are closed.