El cine dominicano está en auge, no cabe duda, muestra de ello es la cantidad de jóvenes preparados en el extranjero que están volviendo al país a poner en práctica lo aprendido. Otra muestra fiel del desarrollo de la industria, es el cuidado y esmero con el que se están realizando las últimas películas y que, sin duda, dejan en muy buen lugar el nombre de la República Dominicana en este género.
Así lo expresa uno de los más laureado y reconocido cineasta dominicano, René Fortunato, quien augura a la industria del cine dominicano un futuro promisorio, siempre y cuando se le preste atención a varios aspectos que son importante para garantizar la calidad de una buena película y su proyección a nivel internacional.
Fortunato, pionero en el país en la producción de largometrajes y documentales, nos adelantó algunos datos de su nueva película, será de ciencia ficción, está desarrollada y ambientada en la Era de Trujillo. Dispone de guion y presupuesto ya listo, y, se está trabajando en la música y la estructura del lanzamiento. La misma empezará a rodarse a principio del 2021.
René Fortunato en la grabación de la película «Patricia el regreso del sueño».
El productor, que incursionó en el cine de ficción con el estreno de la película “Patricia, el regreso del sueño” en el año 2017, expresa que actualmente nuestro país cuenta con muy buenos actores profesionales y preparados intelectualmente, muestra es que varios de ellos están destacando en el extranjero y cada vez más participan en películas importantes a nivel internacional. “Tenemos muy buenos profesionales, pero otros no lo son tanto”.
Inicio del cine en República Dominicana
La producción cinematográfica como industria se inicia con la Ley de Cine. Antes, explica Fortunato, se hacía producciones dispersas. La primera película que se hizo en el país fue “La peregrinación de la Virgen de la Altagracia”, de Francisco Arturo Palau, en la década del 20. A ésta le siguen, después de la muerte del dictador Rafael Leonidas Trijillo, “La Silla” de Franklin Domínguez y Camilo Carrau. Más adelante, en 1988, se produjo “Un pasaje de Ida”, dirigida por Agliberto Meléndez, guion de Adelso Cass y Danilo Taveras, música de Rafael Solano y un reparto encabezado por Ángel Muñiz, Carlos Alfredo Fatule, Rafael Villalona, Juan María Almonte, entre otros.
En el año 1995, recuerda, Ángel Muñiz escribe y dirige, la película “Nueva Yol”, protagonizada por Luisito Martí, filme con muy buena aceptación del público y, a partir de entonces se empieza a despertar el interés por desarrollar el cine como industria y, es cuando los sectores económicos del país muestran interés por invertir en el género.
Afiche de la película “Trujillo, El Poder del Jefe”.
Sobre la calidad del cine que se produce, Rene, resalta que, como toda industria incipiente, suele haber aciertos y desaciertos por lo que el tiempo dirá que producciones cinematográficas perdurarán en la memoria colectiva del publico dominicano.
Su estreno en el cine documental se produce en 1986 con “Tras la huella de Palau”, en homenaje al primer cineasta dominicano, luego en el 1987 hizo “Frank Almánzar, imagen de un artista”, ambos cortometrajes. Pero, el punto de partida, donde la gente empezó a conocer y seguir su trabajo fue en 1988, con el estreno, en casi todas las salas de cine del país, del largometraje “Abril, la Trinchera del Honor”, el primer largometraje del país, de los primeros de la región del Caribe y uno de los más reconocido y premiado. “Este largometraje cumple 32 años y todavía la gente lo sigue viendo, comentando y buscando”.
Su principal objetivo al hacer cine, dice, es contribuir al fortalecimiento de los valores culturales de la nación dominicana, esos valores que nos distingues y nos diferencias de las otras nacionalidades. “El grado de satisfacción que siento cuando trabajo es amplio, aunque creo que siempre puedo hacerlo mejor”. Su mayor placer como artista es recibir el apoyo de la gente y, que a través de los años siguen hablando y buscando sus producciones.
Destaca que, a excepción de su ultimo trabajo, “Juan Bosch, presidente en la Frontera Imperial”, 2009, nunca recibió apoyo económico ni logístico de ninguna institución del Estado en la realización de sus primeros largometrajes. La ayuda que recibió vino de amigos y relacionados que creyeron en su trabajo, pero a nivel de institución oficial, ninguna.
El cineasta capitaleño, dice que lo del éxito en las taquillas no ha sido nunca el objetivo principal de su trabajo. Produce cine por una satisfacción personal y una manera de contribuir con un objetivo que se plantea. “Lo que realmente me importa es que mis producciones tengan un alto nivel de calidad en todos los aspectos y que eso se transmita al público que va a verlo”.
Afiche película “Perico Ripiao”.
A parte de las mencionadas anteriormente, existen otras producciones de cine importante en nuestro país, entre las cuales figuran, la trilogía de Fortunato, “Trujillo, El Poder del Jefe I, II y III”, “Perico Ripiao”, “Andrea”, “La Lucha de Ana”, “Nueva Yol I y III”, “Ladrones a domicilio”, “Yuniol”, entre otras.
